Este disco va a sorprender a muchos. Viva Emptiness marca un cambio importante para Katatonia. Después de lo que empezaron con Discouraged Ones y perfeccionaron con Tonight's Decision y Last Fair Deal Gone Down, esta es la primera vez que hay claros cambios en el sonido de la banda. No así en la intención, que sigue siendo crear música introspectiva, triste, depresiva y de enorme impacto emocional.

Me va a resultar casi imposible explicar cómo suena Viva Emptiness porque los cambios son absolutamente enriquecedores y agregan matices increíblemente bellos y complejos al sonido clásico de Katatonia. Hay que decirlo, los riffs inolvidables de Anders Nystrom no están tan presentes. Su guitarra juega esta vez un rol más climático, cercano al trance, marcando una pared de sonido demoledor o dedicándose a una serie de arreglos finísimos. Jonas Renske con su suave lamento suicida sigue tan presente como siempre y engancha a la perfección en este nuevo ambiente.

Tracks como "A Premonition", con sus delicados arreglos que lo acercan a una malvada canción de cuna, o "Burn The Remembrance", que arranca con una extraña percusión y luego se lanza a un machaque aplastante, son clásicos instantáneos que siempre debieron haber existido. Por otra parte, en "Omerta" se nota una saludable influencia de sus amigotes de Opeth.

Viva Emptiness es un nuevo punto altísimo de creatividad en la carrera de Katatonia. Una fantástica sorpresa, siempre espero mucho de ellos pero esta vez superaron mis expectativas ampliamente.